sábado, 14 de septiembre de 2013

Es todo como un sueño, como si nada fuera real. Lo miro y siento que no existe y que no puede existir alguien que yo quiera así en este mundo. Tan irreal, tan onírico. Si esos ojos son reales, si esa piel, si esas manos existen de verdad, son más las ganas que me invaden de querer verlo.
Y pasan los días tan lento y rápido a la vez que se me hace interminable la agonía de sentir sus brazos rodeandome y su voz y eso que lleva adentro que es tan difícil de ver, pero que es lo que me hace sentir más y más amor cada vez. El no poder verlo me mata cada día un poco mas, me come salvajemente  un pedazo del corazón  y después de saber que me quiere, que me ama, que no puede resistir esto sin mí, es cuando me desazo en sollozos. Y el agua cae y cae sobre mi cara y no puedo pararlas, la tristeza me rodea de muros grises y me ilumina con esa luz opaca y oscura que me hace ver todo en blanco y negro.
No, acá no, que nadie me vea.
Y me sumerjo en agua, en la ducha, donde todo es gris y blanco y el agua se transforma en olas de mar saladas y oscuras, donde no puedo ver el fondo ni dónde estoy parada. Y me sumerjo más y más hasta poder escuchar mi corazón que pareciera gritar su nombre cada vez y mis dedos lo piden escandalosamente, mis ojos, mis piernas, mis labios, toda yo lo pide escandalosamente.
Siento el agua caer sobre mi. Sé que lloro, que aún salen lágrimas pero no las distingo de las demás gotas dulces que nada tienen que ver con la tristeza y las pruebo.
Unas saben a nada, a inocencia, a completa neutralidad y otras están cargadas de mí, de tristeza, de abrazos huérfanos, de palabras atragantadas en el corazón y logro convencerlas de volver a entrar.
-Hace mucho que estás ahí, anda saliendo....
No mamá, quiero quedarme acá sumergida en las lágrimas del cielo y yo para siempre. Y para siempre significa hasta que él vuelva, hasta que él logre volver y agarrarme del brazo y abrazarme como dijo que lo iba a hacer y besarme hasta quedar disueltos en el aire. Eso significa para siempre, sólo él, sólo él.