lunes, 3 de junio de 2013

Día 8. Gracias.

Me pregunto quién puede vivir sin sueños. Cuando escucho a alguien decir: mi trabajo no me apasiona. Y alguien le pregunta: y qué te apasiona? Y responden "no sé" no les puedo creer.
Cómo es posible eso? En esta vida llena de maravillas que no tengan pasión por algo es increible.
Puede que hayan empezado a trabajar de eso cuando les gustaba, cuando los hacia sentir llenos, libres, los hacía felices y ahora ya no les guste. Y bueno, ¡cambien! Encuéntrense, hagan lo que los apasiona, lo que los hace volar!

Ya dije que nunca quiero perder esa pasión por pequeñas cosas.
Ahora llueve y quiero ir corriendo bajo la  lluvia y empaparme la cara.
Quiero sentarme en un viejo café, con un libro y ver como la gente pasa y corre tras la vida.
Quiero andar en bici por esos caminitos que están llenos de secretos.
¿Por qué será que esas cosas me gustan tanto?

Los días transcurren y cada día me siento mas cerca de mi misma, mas conectada con todo, mas segura. Tengo que decir gracias por todo y a todo. Gracias.

Mis días no son de muchas palabras. Pero les dejo unas cancines que me marcaron el corazón y que se van a quedar ahí por siempre:






Día 7. Simple felicidad.

Las pequeñas cosas de la vida.  Miro por la ventana y el cielo está gris, el contraste que hace con el naranja de las ramas de los sauces es encantador. Me acerco un poco mas y veo las montañas nevadas, bañadas de nubes, nubes y amor.
Pienso.
Pienso en que piensa la gente cuando decide suicidarse. ¿No les preocupa no volver a ver las montañas nunca más?, ¿y besar a alguien que amas después de mucho tiempo?. ¿No les dan ganas de seguir viviendo cuando piensan en llorar y disfrutar como todas las penas se van barriendo de uno? ¿ no les dan ganas de viajar, de ver el mundo? ¿de leer muchos libros? ¿de acariciar a su mascota? ¿de reirse, reirse sin parar?

La vida es tan hermosa y no sé como transmitir lo que siento con palabras.
Cosas tan sencillas que hago en el día me hacen tan feliz.
Una buena taza de café en mi taza favorita mientras leo un libro sentada en el sillón. En la cara que pone la gente cuando le sonreís sin razón. Cuando le deseas un buen día a alguien que nunca se sintió bien. Cuando olés una flor hermosa y disfrutas ese regalo que ella te está dando. Cuando ves en los ojos de algún animal ese cariño incondicional que te hace tan feliz. El simple hecho de salir afuera y sentir que estás viva. De estar viva!  eso es un regalo!